30 agosto, 2005
NO HAGAS CASO, SON RUMORES
30 agosto, 2005
Ruído, mucho ruído.
De voces encendidas, de miradas apagas
no hagas ruído por favor, mi cabeza ya está bastante perturbada.
Escucho sin darme la vuelta
Aparto la mirada y me concentro en un punto fijo
No hay nada, blanco, estático dejo mi mente del mismo color incoloro, sin color incoloro, incoloro sin color, sin color incoloro; vamos si color.
Mis orejas están a mitad de camino entre la locura y mí mismo
Meto los dedos en los oídos y el murmullo continúa incesante como
el run run de un viejo motor de coche, como el sonido continuo de mar aunque la sensación no es de sosiego.
Un enjambre de abejas reboltean inquietas en busca de dulce miel por mi cabeza
los zumbidos van al compás de mi mirada, si miro arriba, se calman, si miro hacia abajo se condensan, se enfurecen
Un rebaño de ovejas pace en mi cabeza
apenas me inquietan, sólo comen y duermen
la paz asfixia como una bolsa plástico metida en el cerebro
Anoche una familia de gorriones construyó su casa en mi cabeza
la cría tenía un hambre voraz, su padres no podían cubrir esa necesidad
Me olvido de todo.
La cabeza está para algo más que sonreir cuando alguien cuenta un chiste malo o pensar en pensamientos pensados por otros
Vive tu propia vida, piensa tu propia vida
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5 comentarios:
Cambio ruido y rebaño de millones de coches, por rio y rebaño de millones de cangrajos de mar.!!
hasta pronto, por cierto me encanto ser esmeralda !!
Tiene cierto aire de Bukowsky tu poema, quizá por la forma de cerrarlo (que es una forma de dar un final abierto), pero una voz muy original. Me ha gustado mucho tu blog. saludos, Angel.
Wweeggee, a colación de tu comentario de mayo del Sueño Esmeralda, podría ser, al final al cabo todos respiramos el mismo aire viciado, todos soñamos por las noches y quien nos dice que no hay alguién al otro lado del mundo que está soñando en tu sueño. En un episodio de Doctor en Alaska ( una de mis series favoritas, si no la que más ), Cris descubre unas extrañas plantas que crecen en la ladera de una montaña, por lo visto tienen miles de capullos y de racimos repartidos a lo largo de kilómetros y kilómetros, pero todas estás unidas por la misma raiz, quizás todos estamos conexionados como en mi cuento o como el episidio de Doctor en Alaska.
Buenas Angel, visitando el tuyo también me ha gustado mucho las citas que reflejas, me he hecho partícipe en en tuyo. Ya bucearé un poco más. Nos veremos
"Al que dirán", que le den....
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