De Libros: LOS RENGLONES TORCIDOS DE DIOS

Como ya he dicho alguna vez no soy un gran lector de libros, es por ello que no estoy en posición ni disposición de evaluar ningún escrito, me decanto más por los cómics, temas fantásticos, temáticas distintas, alternativas, me pasa lo mismo con la música y en general con todo. Estas aficciones dejan de ser " raras " en el momento en que millones de personas también las siguen. Simplemente no es lo que nos meten por los ojos o por los oídos los medios de comunicación, pero ahí están, al alcance de cualquiera, no es lo fácil, pero ahí están.

A lo que vamos, a pesar de lo comentado en cuanto a mi aficción por la lectura, siempre tengo un libro entre las manos, lo voy leyendo a mi ritmo, devorándolo con dientes de ratón, a un tiempo retardado, entre estación y estación. Ojalá leyera menos, eso querría decir que no tengo que coger transporte público. De todas formas el sentido de estas líneas no es quejarme ni mucho menos, tampoco tengo motivos, sino comentaros que acabo de terminar " Los renglones torcidos de Dios " de Torcuato Luca de Tena.

Me ha parecido un libro que ha pesar de tratar temas complejos de la " cabeza ", llega bastante al lector general, emplea tecnicismos pero siempre acompañados de breves paréntesis en los que explica el significado de esta u otra enfermedad. Los personajes me parecen increíbles, muy imaginativos y a la vez normales dentro del mundo de la Psicología o Psiquiatría.
Te mantiene en vilo en todo momento, sumergiéndote en la personalidad de Alicia la protagonista ( a lo mejor el nombre de Alicia lo ha cogido por " el país de las maravillas ", o sería mejor decir " el país de las demencias " ). Me ha gustado mucho, aunque para mí sobra un cuarto del libro, es una apreciación personal.

Este es un breve pasaje del libro, cuando una trabajadora social del centro le dice a la protagonista que se va a " meter a monja ".

_" Me gustaría - insistió Alicia - penetrar hasta el fondo en el conocimiento
de eso. En el entendimiento de lo que dices. ¿ No es más santo cuidar
leprosos que rezar maitines ?. Cuando esos admirables enfermeros de la "
Jaula de los Leones " levantan, lavan, visten, dan de comer en la boca,
desnudan y acuestan en la cama a los dementes; cuado éstos se hacen encima
sus necesidades, y sus cuidadores los limpian y cambian de ropa, varias
veces al día, ¿ no están haciendo más méritos que quienes rezan tres
rosarios o están dos horas de oración ante el Sagrario ?

_! No se trata de una carrera de méritos, Alicia ! "